La otoplastia en niños y niñas es muy común. Muchos de los pacientes que se someten a una otoplastia son menores de edad. Pero ¿cuál es el motivo de que la otoplastia infantil sea tan habitual?
Las malformaciones auriculares pueden ser congénitas y afectar a la forma de las orejas y su posición, como hellix valgus, soplillos, orejas en asa, microtias, macrotias, orejas despegadas, y otras. Hay que explorar y descartar asociación con otras malformaciones faciales infantiles.
En otros casos pueden producirse problemas tras traumatismos o quemaduras. Hemos visto también muchas mordeduras de diferente tipo.
En la actualidad, nos encontramos con un aumento de consultas por orejas en soplillo, separadas continuamente por culpa del uso intensivo y continuado de mascarillas por la pandemia Covid.
Cuando hay problemas en las orejas, los niños se pueden ver afectados en sus primeras relaciones sociales. La causa puede ser las burlas de sus compañeros, esto hace que se vuelvan tímidos, que tengan baja autoestima y que puedan desarrollar otros problemas psicológicos.
De hecho, podemos ver como niños o niñas con orejas en soplillo las ocultan con el pelo o usando cintas para disimular este problema estético ante sus compañeros.
A esta operación de Cirugía Estética se someten muchos pacientes adultos que deciden corregir su malformación cuando son mayores.
La mayoría tienen mal recuerdo de su adaptación, algunos ocultan con cabello sus orejas, o no se hacen colas en el pelo a pesar de su madurez. Casi todos responden que hubieran preferido hacer una otoplastia durante la infancia. A veces los niños no son buenos y se burlan de los defectos de otros.
Quizás sea bueno recordar a los padres que eduquen a sus hijos en la comprensión y el respeto a los defectos de los demás.
Nuestro consejo a los padres es vigilar el comportamiento del menor y, ante la sospecha de que las orejas le producen algún tipo de trauma, consultar las posibles soluciones con un Cirujano Plástico cualificado.
El Dr Sancho recibió formación complementaria en Cirugía Plástica Infantil y malformaciones craneofaciales con los doctores Ortiz Monasterio y Molina en el Servicio de Cirugía Plástica del Hospital Gea Gonzalez. Es un centro de referencia para estas patologías en México.
Una operación de orejas de soplillo en niños no es una cuestión estética, la consideramos un ejemplo de Cirugía Plástica y Reparadora con el objetivo de evitar problemas emocionales en el menor.
Afortunadamente, la operación de orejas en niños es un tipo de intervención quirúrgica meticulosa pero con bajo riesgo de complicaciones si se utilizan técnicas actualizadas y mínimamente invasivas. El postoperatorio no revierte grandes dificultades para el paciente.
¿Las orejas de soplillo se corrigen con la edad?
No. Las orejas de soplillo no se corrigen con la edad. Es más, el paso del tiempo puede acentuarlas debido al crecimiento de las mismas o a otros factores que las hacen más visibles como la pérdida de pelo en los hombres, etc.
De ahí la importancia de operar orejas de soplillo en niños a edades tempranas, antes de que su aspecto físico comience a pasarles factura a nivel psicológico, supongan un problema social o laboral en el futuro o sean más patentes llegada la madurez.
En definitiva, se trata de que el menor desarrolle un nivel de autoestima y seguridad adecuados lo antes posible. Además, podemos evitar que le afecte cuando sea mayor o tenga malos recuerdos de su adaptación durante su desarrollo.
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Corrección de orejas de soplillo en niños con la operación de otoplastia.
Corregir orejas de soplillo en niños es posible mediante la intervención de otoplastia meticulosa pero rápida, poco dolorosa, y trata de ser lo menos invasiva posible si empleamos técnicas actualizadas.
Desde el punto de vista estético, se trata de alcanzar un resultado natural y armonioso. Esto significa que el conjunto facial logra una imagen equilibrada, en la que las orejas no llamen la atención al mirar a la cara del paciente.
Existen múltiples técnicas de otoplastia que pueden ser agresivas en mayor o menor grado e incluso se pueden combinar entre ellas.
La técnica que se emplee dependerá del problema que queramos corregir; pero, desde nuestra experiencia, preferimos usar técnicas poco agresivas.
Gracias a estas técnicas se modela el cartílago de la oreja plegándolo sobre sí mismo, sin tener que cortarlo ni extirparlo. Con ello logramos la máxima naturalidad con la menor probabilidad de complicaciones, sobre todo en el caso de las orejas de soplillo o cirugía para orejas separadas.
En la mayor parte de las intervenciones de otoplastia, la cicatriz queda escondida en un pliegue por detrás de la oreja, por lo que no se ve a simple vista.
Operar orejas de soplillo en niños no entraña, pues, grandes inconvenientes o complicaciones, de ahí que muchas familias se animen y apuesten por la otoplastia como solución segura, definitiva y de resultados inmediatos y excepcionales.
Como pueden existir diferentes tipos de malformaciones, hay que valorar cada caso para planificar la técnica mas adecuada.
En niños mayores y adultos puede hacerse con anestesia local asociando o no sedación, sin necesidad de permanecer ingresado.
En cuanto a la intervención, si el paciente es un niño muy pequeño se deberá considerar hacerlo con sedación o anestesia general.
Siempre realizamos la otoplastia en quirófano con todas las medidas de seguridad de nuestro hospital de referencia.
En tiempos de pandemia Covid, tenemos que adaptar las mascarillas para evitar el apoyo detrás de la oreja durante el postoperatorio. Igualmente recomendamos el uso de bandas durante la noche y mantener cuidados e higiene en la zona retroauricular.
Orejas de soplillo en bebés.
Las orejas de soplillo en bebés son muy habituales. La mayoría de recién nacidos las tienen pegadas a la cabeza, pero al cabo de unos días o semanas, estas comienzan a tomar la que será su forma habitual.
Muchos padres se inquietan al principio, pues las orejas del bebé parecen de soplillo o muy prominentes, sin embargo, se debe más bien a la ausencia de pelo y el efecto óptico que eso causa. Una vez el bebé va creciendo y desarrollando sus facciones, estas parecen adoptar una forma más estética y en sintonía con el óvalo facial.
Queda descartado corregir orejas de soplillo en bebé mediante cirugía. Lo adecuado es esperar a que estas se desarrollen y definan por completo junto al resto del óvalo facial: fisiología, expresión… Solo así se lograrán resultados óptimos. Sin contar que debemos evitar someter a cualquier bebé a intervenciones que no sean estrictamente necesarias por su seguridad, bienestar y comodidad.
En todo caso, y aunque existen técnicas que indican cómo corregir las orejas de soplillo en bebés sin acudir a intervenciones quirúrgicas excesivamente prematuras o remedios para las orejas de soplillo en bebés, estas no resultan efectivas.
¿Qué edad es la mejor para hacer la otoplastia en niños?
Es muy habitual que los padres nos consulten y nos pregunten lo siguiente: “¿A qué edad es mejor operarle a mi hijo las orejas en soplillo?”
Desde pequeños hay que estar vigilantes de cómo se desarrollan las orejas. Habitualmente se van adaptando con normalidad. Sin embargo, no siempre es así.
En ocasiones estas toman una forma muy prominente o separada del cráneo que en vez de solucionarse parece empeorar. Es ahí cuando los padres han de estar atentos al comportamiento del menor respecto a sus orejas para tomar la decisión de corregirlas.
Si las ocultan, o lo pasan mal con los compañeros del colegio, o si de alguna manera captamos que influyen en el comportamiento o autoestima del niño la mejor opción es corregir el problema mediante Cirugía Plástica auricular, aplicando diferentes técnicas de otoplastia.
La otoplastia en niños se suele hacer cuando ellos tienen de los 5 a los 15 años, siendo lo más frecuente a los 5 o 6 años. Es una edad en la cual las orejas están suficientemente desarrolladas y el niño ya es capaz de entender mejor la intervención. Además, puede colaborar activamente con las recomendaciones postoperatorias, como son el cuidado de las heridas, uso de cinta, etc.
Aunque el paciente sea adulto o menor de edad, en el momento de considerar una otoplastia se debe hacer una exhaustiva valoración no sólo de las orejas, sino también de todas las características y proporciones faciales. El objetivo principal es lograr un resultado natural y no exagerado, para que no llame la atención y se encuentre en un contexto de proporción facial armónico y agradable.
Otoplastia infantil para reducir orejas grandes en niños.
Al igual que ocurre con personas en edad adulta, la otoplastia representa una solución para aquellos niños con orejas grandes o despegadas o para los que presentan malformaciones o secuelas visibles tras un traumatismo.
En todos estos casos, la otoplastia infantil es una solución segura y fiable cuyos resultados tienen la ventaja de ser precisos y acordes a nuestras expectativas.
Peculiaridades de la otoplastia en niños.
Si bien es frecuente realizar otoplastias en niños, también puede realizarse este procedimiento en edad adulta.
Hay que tener en consideración que las características anatómicas de las orejas son distintas en un adulto y en un niño. Así por ejemplo, el cartílago auricular de los niños es más fino y por lo tanto, más flexible. También la piel es menos gruesa y más delicada.
En adultos se realiza siempre bajo anestesia local. Sin embargo en niños, puede ser necesaria la sedación leve o la anestesia general dependiendo de la edad y actitud del menor.
De hecho, toda intervención de otoplastia requiere un exhaustivo examen físico previo. Este incluye la valoración de las orejas en el contexto de cada cara, y estudiando la forma de la concha auricular, el hélix y el antehélix, para que el resultado sea natural y simétrico.
Debemos recordar que existen muchas formas de denominar las orejas que tienen una alteración de la forma o posición de los pabellones auriculares, tales como “orejas aladas”, “orejas prominentes”, “soplillos” y otras . Todas ellas encuentran en las diferentes técnicas de otoplastia el procedimiento adecuado para su corrección.
El Dr. Sancho y su equipo, realizan Otoplastia y otras técnicas de Cirugía Plástica y Estética Facial en Vitoria (Hospital Vithas San José) y Sevilla (Hospital Fátima), con idéntico protocolo y filosofía.
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Dr. Manuel Sancho Jiménez
Cirujano Plástico. Director de UCP Estética.
Especialista con título oficial en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora y Director de UCP en País Vasco y Andalucía, con especial interés en Cirugía Plástica Mamaria Endoscópica y Rejuvenecimiento Facial mínimamente invasivo. Nº Coleg. 48/9365. Miembro de SECPRE, SVNRA, FILACP y IPRAS.
Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Cantabria. Título de Reconocimiento de Suficiencia Investigadora por la Universidad de Salamanca en los cursos de Doctorado en Organización morfofuncional del Sistema Nervioso. Especialización en Endoscopia, Microcirugía mamaria y Cirugía Estética en la Universidad de Liege (Bélgica), Centros Hospitalarios de Barcelona, Bilbao, México D.F.
Fundador y Director de UCP Estética.
Participa activamente en investigaciones, Congresos nacionales e internacionales de Cirugía Plástica y Estética.
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